Frankenstein, la historia detrás de la primera obra de ciencia ficción

Frankenstein, la historia detrás de la primera obra de ciencia ficción

Un día como hoy, hace 227 años, nació la gran escritora Mary Shelley. Para conmemorarla, te contamos la historia detrás de su obra maestra Frankenstein o El moderno prometeo, un clásico de la literatura que todos deberían disfrutar alguna vez. En este libro, Shelley  aborda problemáticas metafísicas en cuanto a la identidad y el uso de la tecnología, siendo considerada así como la primera obra de ciencia ficción. 

Era el año 1816, un verano que pasaría a la historia como "el año sin verano". La erupción del Monte Tambora en 1815 había lanzado tanto polvo y cenizas a la atmósfera que el clima global se enfrió, provocando extraños fenómenos meteorológicos, como tormentas eléctricas repentinas y cielos nublados constantes. En medio de este inquietante ambiente, un grupo de jóvenes intelectuales y poetas se refugió en Villa Diodati, una casa solitaria en las orillas del Lago de Ginebra, Suiza. 

Entre ellos estaban el célebre poeta Lord Byron, su médico personal John Polidori, el joven poeta Percy Bysshe Shelley y su esposa, nuestra querida Mary Shelley, que en ese entonces tenía 18 años.

Para pasar el rato, ya que no podían salir por las fuertes tormentas, Byron propuso que cada uno escribiera una historia de terror. Los días pasaban y Mary se encontraba atrapada en un bloqueo creativo. Mientras los otros discutían sus ideas y avances, ella permanecía en silencio pensando. 

Una noche, después de escuchar a Byron y Percy hablar sobre los experimentos de Erasmus Darwin, quien según decían, había logrado que un trozo de espagueti se moviera al aplicarle electricidad, la escritora tuvo un sueño perturbador.

En su pesadilla, vio a un científico obsesionado trabajando en un experimento. En su laboratorio, rodeado de instrumentos extraños, intentaba darle vida a un ser que había creado a partir de partes humanas. La criatura cobró vida pero era abominable. La imagen del científico horrorizado ante su propia creación quedó grabada en la mente de Mary.

No era solo una historia de terror lo que había soñado, sino algo mucho más profundo: una reflexión sobre las ambiciones del ser humano, sobre la creación y la responsabilidad, sobre la vida y la muerte. Se levantó y comenzó a escribir rápidamente.

En las semanas y meses que siguieron, Mary desarrolló su historia, inspirándose en debates filosóficos y científicos de la época, pero también en su propio dolor personal. La muerte había sido una presencia constante en su vida. Su madre, la filósofa Mary Wollstonecraft, había muerto poco después de darla a luz, marcándola profundamente. Por otra parte, Shelley había perdido a su primer hijo apenas unos meses antes de aquel verano. 

Frankenstein fue publicado en 1818 de forma anónima. Aquel «verano húmedo y desapacible» de 1816 «me entretuve pensando una historia que consiguiera que el lector tuviera pavor a mirar a su alrededor, que le helara la sangre y que acelerara los latidos de su corazón». La novela no solo asustó a los lectores de la época, sino que también planteó preguntas inquietantes sobre los límites del conocimiento humano y una brillante reflexión sobre la ética científica. El libro de Mary Shelley, narra el intento de un joven estudiante de medicina de crear vida artificial y las terribles consecuencias de su experimento, convirtiendo a la escritora en una gran referente del género de ciencia ficción, al ser la primera en abordar estas temáticas.

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